martes, 31 de enero de 2017

El Opus Dei y otros fundamentalismo que nos acosan



¿Ya te has puesto a preguntarte por qué algunas situaciones vuelven a pasar en tu vida?
Bueno, desde luego puede que eso no pase a todos, pero desde luego la frase borgeana "A la realidad le guntan las simetrías y los leves anacronismos" sí que tienen que ver con mi vida.



¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño:
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.” 
― Pedro Calderón de la BarcaLa vida es sueño 

Escena I: En São Paulo, en la uni (que puede no ser la experiencia número uno, pero es la que guardo en la memoria)



Tras dos semestres de asistencia en asignaturas con una eminente profesora en la universidad número 1 de Brasil, al término de la última de las asignaturas ella nos recibe individualmente para dirigir el trabajo de investigación que deberíamos entregarle como tarea final. En esa cita - nos recibía en su despacho -, aparte el repase que hicimos del trabajo que le entregaría - que, por cierto, ya estaba casi finalizado lo que me dispensaría de la cita -, me di cuenta de que su intención no era otra que la de revelarme que era del Opus Dei y tratar de argumentar que aquella era una excelente opción de vida y que, por ello, me invitaba a hacer parte de ese "selecto mundo". 

Siguen algunas consideraciones acerca de lo que me dijo sobre el Opus, me llamaron mucho la atención y todavía guardo en la memoria son:

  1. Cada día tienes que, además de ir a misa u orar (el horario indicado es a las 18h), confesarte con tu confesor, quien también es tu guía espiritual y coordinador de "la obra". Si no es posible hacerlo a diario, debido a "la obra" a que estás destinada, lo tienes que hacer obedeciendo un patrón; 
  2. Si trabajas - como era mi caso y su caso - no eres dueño de tu sueldo sino que lo tienes que dejar todo a cargo de tu "mentor" quien se encargará asimismo de los gastos que tengas en tu vida cotidiana para que puedas mantener el patrón que se espera de una persona que ocupe tu posición en la sociedad. Esa "persona" 9creo que será el jefe de un grupo de contables) asimismo se encarga de tu mantenimiento con gastos como alimentación, viajes (cuando lo haces te quedas en lugares de "la obra" o que te indican el lugar donde deberás quedarte) y gastos cotidianos como higiene personal, teléfono, etc;
  3. No eres dueño de tu casa - si la tienes - sino la obra, sin embargo puedes vivir allí como si tu casa fuera pues tienes que mantener las apariencias de un ciudadano corriente. Por otra parte, si no tienes una casa, puedes vivir en cualquier lugar - que posee la obra - que haga falta para que cumplas "la obra" a la que estás destinada en la sociedad, de la mejor manera posible;
  4. Se valora el celibato, es decir, la castidad. Lo que no quiere decir que los que estén casados no puedan forma parte de "la obra", sino que el matrimonio será acompañado en su vida cotidiana por un "mentor" común.
Creo que no hace falta decir que no sólo el contenido de la reunión me dejó tremendamente preocupada y pasmada, sino y sobre todo los interrogantes qué, por qué y quién llevó a esa mujer a creer que yo pudiera acordar con toda esa insanidad y relegar mi vida a un sonambulismo ajeno a mi voluntad y responsabilidad de vida. 

Por supuesto que no le dije nada - puesto que el silencio todavía sigue siendo la mejor respuesta principalmente para personas que difícilmente sabrán su significado -, tampoco le demostré mi indignación. Todo lo contrario, tengo que admitir que el hecho de ser profesora ayuda en el control de las emociones. Me puse tranquila, le dije que me sentía muy afortunada de haberle despertado ese tipo de interés y que tendría que planteármelo en serio para darle una respuesta. Y, claro, me invitó a conocerlo todo, a frecuentarlo primeramente para que me pusiera al corriente de esa "realidad". Pero sinceramente, no tuve valor para hacerlo. O tal vez porque pudiera ser un descaro desmedido de mi parte si lo hiciera o aun por temer que el poder ideológico que pudieran imprimir en mi mente. Sabrá Dios las estrategias que utilizan para transformarles a "sus numerarios" en dulces ovejas para "la obra"...



Escena 2: En Madrid, mientras hacía el máster en lengua y literatura


Porque es difícil vivir en país extranjero, en un piso con una señora española que tiene un patrón de higiene diferente del tuyo y que te obligaba a limpiar la cocina si la deseabas utilizar y tras utilizarla (un único comentario: la cocina de esa señora parecía más una escena asquerosa que propiamente un pieza de la casa), decidí que sería mucho más sano e inteligente invertir mis pesetas - eran los '90 - en una residencia en la que se incluyeran las comidas y que así gastaría mucho menos tiempo, recursos psicológicos y financieros para estudiar y vivir "como Dios manda".  

María Elena, la amiga de un gran profesor que tuve y funcionaria de la Embajada de Brasil en Madrid, fue quien me indicó la Residencia de Estudiantes ideal, es decir, una que era "buena, bonita y barata", sólo el nombre que era un poquito siniestro: Esclavas de María. Allá vamos. Por cierto, si no lo saben hay el Colegio Mayor Casa do Brasil en el campus de la Complutense, pero como me advirtió M Elena, sirve a los ricos, del mundo, no solo a brasileños. Es cierto, soy testigo, el precio de una habitación allí superaba en mucho el valor de cualquier beca que he tenido - tanto brasileña como extrajera - para malgastarla con ese colegio Mayor. Y como dice el refrán "por donde fueres haz lo que vieres", mejor estar en una de las muchas resis en las que suelen quedarse que una que traiga la referencia de tu país y te cobra "un huevo y la mitad de otro".

María Elena solo me pidió dos cosas tras conseguirme la vacante tan anhelada en la "Esclavas de María": que me llevara bien con las monjas y que tratara de transmitirles la mejor imagen posible de Brasil para que siguieran aceptando a brasileñas. Desde luego, ya digo que era imposible no llevarme bien con la madre superiora, Sor María, además de gallega era la ternura y la sonrisa en persona. 

Así que para llevar a cabo las dos recomendaciones no hice más que frecuentar la misa a veces, haciéndome cargo de la lectura de la liturgia y participar en la celebración de la Semana Santa (imposible no hacerlo, nos despertaban las monjas cada día por la mañana cantando "alabaré, alabaré a mi señor" no había cómo dormirse con tal entusiasmada y desafinada cantata).

Desde mi punto de vista, fue muy parco mi empeño en participar de las demandas monásticas con el objeto de darle una buena impresión de "las brasileñas" - por cierto era así que me conocía, por "la brasileña", me sentía como una animal tropical cuando me nombraban -, porque encima cada fin de semana me ausentaba debido a los viajes que hacía para conocer mejor la península y sus colores locales. 

Había en esa ocasión dos mayoristas de viajes culturales - Unijoven y Mundo Joven - que nos ofrecían viajes de un día - domingo en especial - o fin de semana. Eran baratísimos, por lo menos, cabían en mi presupuesto becario AECI -. Y había la ventaja de que si salían el sábado para volver el domingo por la noche, sor María le pedía a las cocineras que me dejasen preparado un bocadillo - aquellos panes maravillosos con jamón serrano y queso manchego, frutas y un yogur o zumo - que a veces duraba todo el fin de semana, sin la necesidad de gastos extras con comida, porque estaba en plan "ahorrar para poder viajar más". 

Así fue tan exitoso el plan "ahorrar para viajar" que puedo decir que conozco mejor la península - sus cantos, historia y encantos, pues los viajes los hacía con historiadores y estudiosos del lugar - que muchos españoles. Así que de ahorro en ahorro, la beca me rindió no solo para comprarme gran parte de la biblioteca de libros del área en el que actúo, sino también para hacer viajes más largos como a Italia, Portugal y Francia.

Como el final de mi estancia se acercaba y tenía que entregar y defender mi tesina, he tenido que quedarme un par de fines sin viajar. En uno de ellos me llama sor María para una charla y me propone ingresarme en la vida monástica. Era algo así:





Vaya, vaya, vaya. Otra vez me ha pasado. Otra vez me hago las mismas preguntas y consideraciones de antes de antes. 

En resumidas cuentas, le agradecí mucho la confianza y consideración  y le dije que lo plantearía en serio, pero que lo haría desde Brasil, pues allí la iglesia seguramente me necesitaría más.

Le dije a María Elena que había cumplido con honor y mérito los encargos que me había hecho, le conté lo que me había pasado y nos reímos juntas.



Escena 3: La política como fundamentalismo religioso


Meus heróis morreram de overdose
Meus inimigos estão no poder

Ideologia

Eu quero uma pra viver
- "Ideologia", Cazuza

Como ya he señalado - en especial en lo que escribí acerca de la película "Neruda" -, estamos pasando por una época un poco más convulsa que lo "normal" y "corriente". Tengamos siempre en cuenta que cuando utilizo estos dos términos, lo hago bajo la observación que hizo Carlos Fuentes en entrevista al "Roda Viva": que la realidad brasileña supera en mucho la ficción al punto de ésta ser la explicación para el hecho de aquí en Brasil la literatura fantástica y real maravillosa no haber florecido tanto como en Hispanoamérica.

Pues ya ves, a veces me pregunto qué es lo que lleva a uno plantear que puede convertir a una a un segmento religioso o político que le resulta totalmente equivocado o incluso le despierta un sentimiento contradictorio que se acerca a la apatía y la aversión a la vez. 

La respuesta puede ser sencillamente que la persona está tan envuelta por su universo ideológico que no es capaz de leer más allá de lo que se le impone como realidad y verdad.

Hace algún tiempo vi la entrevista de 
Elie Wiesel (os dejo como enlace la transcripción de la traducción al portugués, merece mucho la pena leerla y reflexionar acerca de su puntos de vista como personaje histórico de sucesos impactantes del siglo XX) programa Roda Viva, y el director de la entrevista, Paulo Markun, la empezó por la siguiente frase del entrevistado: "Lo contrario del amor no es el odio, sino la indiferencia. Lo contrario del arte no es la fealdad, sino la indiferencia. Lo contrario de la vida no es la muerte, sino la indiferencia". Creo que esta frase simbólicamente representa mi capacidad de indignación y asimismo la redacción de estas pocas líneas que, espero, refuercen mi posición frente a las situaciones de enfrentamientos ideológico.

Por otra parte, en esa misma entrevista, Weisel nos llama la atención a algunos eventos que probablemente resultaron en el desastre conocido como siglo XX. Uno de ellos fue el Tratado de Versalles que resultó en la humillación de los alemanes, según el escritor judío y superviviente del holocausto, Hitler probablemente no hubiera accedido al poder si el pueblo alemán no hubiese sido humillado. Hablemos acerca de las formas de indiferencia, sumisión y humillación.

Me parece clave aludir a otros tres documentales. El primero "Chomsky & Cie", documental francés que nos demuestra el pensamiento político de Chomsky y sus seguidores a través del recorrido que hace sus directores hasta la entrevista con el tan demandado lingüista y activista político norteamericano. 




Uno de los puntos claves del documental es el análisis de cómo la estructura política capitalista establece maniobras de manipulación de prensa, consumo y conocimiento para el mantenimiento del status quo. Y cuando se dice que esto es o no de interés de EEUU queda claro en el documental, que el significado de la entidad "EEUU" significa las grandes empresas/ instituciones - es decir, el la entidad empresarial/ figura  fantasmal que representa una pequeña élite - que financian las campañas y el status político del gigante capitalista.

El otro, es el notar cómo los periodistas que en serio se creen o dicen libres - por supuesto que conocemos a muchos que lo dicen  con descaro - , no se dan cuenta de que no son más que marionetas de ese muy bien ejecutado juego de manipulación del conocimiento (a partir de 14:10 del documental).

Hay otros puntos que os dejo en abierto. Merece mucho la pena verlo para reflexionar acerca de la "sumisión voluntaria" en el mundo en que vivimos.

Pasemos al segundo documental, "Ivory Tower", de 2014 (solamente hay una pequeña parte disponible en youtube, pero si tienes netflix lo puedes ver entero :-))  que trata del sistema de educación de EEUU. 

Ese documental te sirve para reflexionar acerca de lo que piensan, de veras, "las personas" que defienden la privatización de la enseñanza e investigación (no solo en aquel país, dicho sea de paso). Yo como ciudadana, deudora del sistema brasileño de enseñanza pública - que aunque fallo, me posibilitó la posibilidad de tener acceso al conocimiento en sus múltiples manifestaciones -, sincera y fuertemente rechazo cualquier tipo de idea de privatización de la educación, pues entiendo y tomo como ciertas todas las denuncias hechas tanto por Chomsky, como por los diretores de este documental.

El último documental al que que voy a referirme es "Emenda", del año pasado - 2016, indicado al Óscar, ojalá lo gane, he dejado el enlace para youtube con un doblaje de dudosa calidad, pero el original lo podéis ver en netflix - en este documental podemos observar cómo se da la manipulación de opinión - a la que se refiere Chomsky - a lo largo de los años y en específico con relación a la asociación de los negros y latinos como seres inferiores, criminales y responsables de todos los males de la sociedad norteamericana. El título alude a la Emenda 13 de la Constitución de EEUU, según la cual nadie puede ser sometido a la esclavitud "excepto como punición de un crimen". No hace falta ser abogado para saber que la excepción se convierte en regla, a depender del cliente, en otras palabras, de quien paga para ello. Así que el sometimiento y la humillación presentes en la esclavitud gana otro matiz más perverso.

La materialización ocurre a través de una relación incestuosa entre lo público y lo privado. ALEC (American Legislative Exchange Council), congrega entre sus miembros a políticos y grandes corporaciones. El documental denuncia que a cada cuatro políticos en ejercicio de sus funciones públicas, uno forma parte de ese "concejo"; que grandes empresas de todas las áreas mercantiles - la farmacéutica Pfizer, el gran vendedor de armas a civiles Wal-Mart,  y otras grandes como Johnson&Johnson, Ford, GM, Google, Shell y VISA - asimismo forman parte, antes con sus nombres expuesto, ahora solamente con colaboraciones presupuestaria astronómicas, pero sin "ánimo de lucro" de asociación de imagen. 

Sin lugar a dudas, este documental es un petardo contra el descaro político, el desequilibrio capitalista, la manipulación de la información y de la "res" pública, la distorsión de los valores... En resumidas cuentas, de la miseria humana. ¿Acaso no seremos capaces de reinventarnos en un sistema político más allá de los ya conocidos y fallidos y que nos lleven a un lugar mínimamente digno y humano? ¿Cuándo la sociedad se dará  cuenta de que se está sometiendo o abandonará este cómodo papel de la "servidumbre voluntaria"? 

Un documental, sin lugar a dudas, obligatorio.

Bajo esa perspectiva cabe aquí aludir a la profunda reforma basilar por la que debiera pasar Brasil. 

Y la base empieza justo con el hecho de perservar y hacer cumplir los derechos que están en la Constitución brasileña, es decir:





  1. La ciudadanía  I - DOS PRINCÍPIOS FUNDAMENTAIS) 
  2. La dignidad de la persona humana (I - DOS PRINCÍPIOS FUNDAMENTAIS)
  3. La igualdad de derechos: hombres y mujeres son iguales en derechos y obligaciones (DOS DIREITOS E GARANTIAS FUNDAMENTAIS - CAPÍTULO I - DOS DIREITOS E DEVERES INDIVIDUAIS E COLETIVOS)
  4. La no sumisión de nadie a la tortura, a tratamientos inhumanos o degradante (DOS DIREITOS E GARANTIAS FUNDAMENTAIS - CAPÍTULO I - DOS DIREITOS E DEVERES INDIVIDUAIS E COLETIVOS)
  5. El derecho a una educación de calidad, laica y pública (CAPÍTULO III - DA EDUCAÇÃO, DA CULTURA E DO DESPORTO - SEÇÃO I - DA EDUCAÇÃO)
  6. La Sanidad como derecho de todos y deber del estado (SEÇÃO II - DA SAÚDE)


Sólo de cumplir estos principios básico, evitaríamos mucho de lo que nos enseñan los documentales. Pero, desafortunadamente, estamos lejos de que se cumplan.

Cada día grupos políticos, debidamente asociados a través de una partido político, de interés adversos a los que están en nuestra Carta Magna se juntan en los moldes del dicho "Dios los cría y ellos se juntan". 
Grupos titulados "evangélicos" que luchan por desigualdad de derechos (civiles) y por la imposición de una educación confesional  - cuyos parámetros medievales espantarían a los medievalistas -; otros autodenominados de derecha que defienden la vuelta de la dictadura militar y su tortura; otros que defienden la privatización de los derechos básicos como la educación pública y la sanidad, entre muchos otros. 

Como es pasible de comprender, tenemos una Diputación y un Senado muy variopinto y nada interesado en proteger la dignidad humana propagada en la Constitución.

Paralelamente a los EEUU que tienen algo con el ALEC, aquí tenemos los partidos políticos. A fecha de hoy son un total de 35 (treinta y cinco), lo que quiere decir que mañana - si no no ocurre la reforma política tan demandada y que pese a que está hace años parada en el Congreso, está lejos de que la saquen adelante - podrá ser llegar rápidamente al doble. 


No que haya diferentes formas y visiones de entender el universo político y social - no, no somos para nada inventivos en este aspecto -, todo lo contrario, esta ha sido la forma "tupiniquim" encontrada para sacar mejor provecho del poder y de las demandas personales de esa élite colonialista que, en palabras de Darcy Ribeiro, no pasa de una "
classe dominante ranzinza, azeda, medíocre, cobiçosa, que não deixa o país ir pra frente!"
Así que pese a todo lo que he escrito, la rueda de la fortuna vuelve a dar su giro y es que me invitan a formar parte, no de una segmento religioso, sino de un partido político - lo que, seamos sinceros, con la situación que acabo de pintar, da lo mismo -, el partido se llama "NOVO", pero de novedoso no tiene nada, en absoluto. 

Me he dado al trabajo de leer su estatuto - dale trabajo y pérdida de tiempo -  y sinceramente no he encontrado allí las raíces de su ideología o vocación política. Se parece más a un reglamento, es decir, normas para que uno se asocie a un club de  compras y, si lo haces, tu principal papel no será más que mercantilista - ¿no es cierto? -  es buscar más adeptos. Dale, aquí está el motivo de la invitación, creo que lo de encontrar más "esclavos voluntarios" le da puntos al asociado.

Así que pasé a buscar acerca de sus, digamos, "socios" fundadores. 
Vaya, vaya, vaya, más parece la cartera del ALEC estadounidense: grandes ejecutivos del mundo capitalista no solo brasileño, sino y principalmente extranjero, cuyos intereses en privatizar derechos y convertirlos - aquellos susodichos - en reserva de mercado son evidentes.

A veces tenemos que hacer el "mea culpa" y admitir que la gran mayoría de las personas está de veras en el transe de la servidumbre voluntaria. El hecho de que consiga razonar y decir NO, sea en silencio, sea con una sonrisa, sea con el alejamiento de la cuestión, a fin de consumar mi "indiferencia" ante la cuestión y la situación, no elide el problema. Desafortunadamente - seamos conscientes-, tampoco alumbra el entendimiento del provocador.

Este tipo de actitud más bien puede darle la oportunidad de la convivencia serena con la diversidad, con lo contradictorio o llevarlo a la violencia de la práctica de la humillación. 

Pero, la Historia nos advierte que esta actitud además de totalmente equivocada nos rinde frutos altamente tóxicos, por los alarmantes índices de muerte y violencia ¿acaso nos estamos en plena guerra social debido al reiterado uso de esos tipos de actitudes equivocadas?



miércoles, 25 de enero de 2017

Dos novelas, un hecho curioso


¿La resiliencia de la resistencia o la resistencia de la resiliencia?

Ese año de 2016, los seleccionado al premio brasileño de literatura Jabuti nos trajo algo curioso, dos novelas que tienen como pantalla de fondo la dictadura militar argentina. 

Se trata de dos autores que no tienen ninguna conexión aparente - por lo menos la desconozco yo, he buscado información y no la he encontrado, así que si alguien la encuentra, por favor, déjame su contribución - que no sea la de que son paulistanos.

Mulheres que mordem - Beatriz Leal


El primer personaje que se nos presenta, me hizo recordar la película "Historia Oficial" (Luis Puenzo, 1985). Elena es una mujer que ante la imposibilidad de tener un hijo generado por sus propias entrañas y pese a que se siente una mujer libre para tomar sus propias decisiones, cede a la posibilidad de adopción. El retoño, una niña recién nacida, se la trae el marido, militar de alta patente del sistema represivo argentino que, según la descripción de Elena es "cariñoso, comprensible, alegre y risueño: un santo". 
Algo muy peculiar de la personalidad de Elena es que padece de un trastorno obsesivo compulsivo (TOC): suele contar la cantidad de mordidas necesarias para la ingestión de cada alimento y asimismo lo hace con la cantidad de pasos que tiene que dar su marido para moverse de un lugar a otro de su casa. 

Es a través del juego narrativo, cuyos capítulos poseen el punto de vista de cada personaje implicado en la trama, que sabemos que Ramiro, el marido de Elena, tiene una personalidad muy lejana a la que describe su mujer. Durante su sesión involuntaria de psicoanálisis laboral, Ramiro nos describe cómo tortura a los presos políticos y qué siente mientras lo hace; cómo consigue a la niña que será su hija y cómo es su relación con las mujeres de su entorno.

Pero hay otros personajes que integran foco de los multiples capítulos de esa narrativa polifónica. Laura, la hija adoptiva de Elena y Ramiro, es un personaje ya adulto y vive en Brasilia, pues tras la muerte de su madre, parte con su padre a un exilio voluntariado por el gobierno para servir en ese país, en el que al llegar busca borrar cualquier huella de su pasado,  y le impone a la hija, incluso, que hablen solamente en portugués. Laura padece de bulimia, tanto de comida como de pensamientos. Trata asimismo de atraer o inventar problemas solo por el raro gusto de masticarlo hasta que se / lo resuelva/n.

Rosa, una de las abuelas de la Plaza de Mayo que busca informaciones acerca de su hija, Clara, torturada y muerta por la represión y a su nieta/o nacida/o en la cárcel. Madre e hija asimismo tienen sus obsesiones. Rosa suele comerse las uñas, lo que le deja avergonzada ante sus alumnos durante las clases de piano. Ya Clara se muerde los labios mientras la torturan. La narrativa de Rosa se hace a través de cartas, se las escribe a Roberto, para darle noticias acerca de su búsqueda de informaciones sobre su nieta/o.

Y Roberto, compañero de Clara, que huye a Brasil tras la caída de su pareja en manos del aparato represivo.

Tanto el espacio físico como el temporal transitan entre las narraciones. Así que Argentina es sinónimo de pasado, fin de los '70 y comienzo de los '80. Mientras que Brasil, el presente actual, 2016. Las formas narrativas - carta, diálogo psicoterapéutico y la mezcla del monólogo interior y la narración en tercera persona - constituyen el carácter peculiar de cada capítulo.

Lo que sin embargo une esas mujeres no es solo el hecho de que todas poseen esta peculiar forma de transcender sus sentimientos a través de la mordedura, sino que más bien ese hecho las define según su modo de enfrentarse al mundo.

Para que la lectura se mantuviera equilibrada sugiero que salten el penúltimo capítulo. Creo que la autora lo pudiera eliminar en una próxima edición.
Acerca de su proceso creativo, sugiero un vistazo a la entrevista:




Aunque nos aclara que su interés es estrictamente ficcional, hay algunos elementos biográficos presentes en la narración: Laura vive en Brasília, al igual que la autora que, asimismo, se mueve en bici por la capital de Brasil, Brasilia.


A resistência, Julián Fuks


Diferentemente de Leal, Fuks tiene y asume como base de su literatura sus demandas biográficas. Desde esta perspectiva, el psicoanálisis tanto de la estructura narrativa - más específicamente de la novela que se convierte en una metaficción - como de las relaciones familiares están presentes en su modus operadi como un mecanismo imprescindible para llevar a cabo (si no) la resolución y el entendimiento (al menos) a través del debate y del acercamiento a ello.

La gran cuestión inicial quizás no sea la que se explicita. Se trata de la resistencia misma del narrador al tratar el tema propuesto - en primer lugar por su hermano y luego por él mismo, y que de a poco se coniverte en barrera, silencio, abismo, disculpa intangible e inacción en la relación de ambos - es el hermano adoptivo. Así que en primer lugar, el narrador en primera persona, plantea la (in)adecuación y pertinencia de los significados que conllevan la expresión de tal situación: hermano/ hijo (es, fue) adoptado/ adoptivo. La pregunta resultante al final de la diálectiva expresiva es, su hermano, ¿hijo de quién? Y es esta la pregunta que lo persigue, más que a su hermano mismo. La construcción de ese vértigo en el lenguaje narrativo lo hace acercarse al sonambulismo de la repetición de palabras y estructuras. Su tono más que monótono es gris y melancólico. Sin embargo, no se trata de una monotonía creativa y desbordantemente poética, sino contenida, estancada y cercenada de su libertad. 


Si en em primer capítulo, el narrador discute la (im)pertinencia expresiva de la situación de su hermano, en el segundo imagina su nacimiento y su adopción a través de la negación: a la repetición de la frase "Não quero imaginar" siguen las situaciones mismas, que se dibujan con detalles de desamparo tanto del hermano que nacía como del narrador que trata de negarlas como ausencia, abandono.


Es a través de la presencia de las varias resistencias del narrador/personaje - de aceptación de las formas expresivas narrativas, de la condición de su hermano, de la situación política de Argentina y Brasil, de extrajero en el ámbito argentino y brasileño, de su hermano como ajeno a la familia, etc - que la novela se constituye como trinchera metanarrativa, al final debidamente critica por sus propios padres, que la analizan no solo como psicoanalistas que son, sino también como personajes que se desilucionan con la memoria/imagen que su hijo construye acerca de sus intimidades. 


He aquí una entrevista suya, en la que nos aclara algunos puntos claves de su quehacer literario. 






Pero, caben todavía algunas consideraciones. 

Al igual que en la novela de Leal, aparece en la de Fuks, además de la presencia de un personaje adoptivo - cuya trayectoria de adopción se pasa durante los años negros de la dictadura de los '70 en Argentina -, la representación del espacio a través del desplazamiento temporal entre pasado/ Brasil, presente/ Argentina

El narrador deambula por un Buenos Aires actual y trata de reconstruir la historia del origen de su hermano en esta ciudad - más a través del lenguaje que propiamente de hechos - y, al igual que un flâner, intenta seguir las huellas históricas presentes en la Asociación de la Abuelas y Madres de la Plaza de Mayo, en el edificio donde vivieron sus padres, en el piso que la familia todavía conserva en la capital argentina. Pero aunque evoca los hecho de ese pasado argentino que no es el suyo, la historia acaba por concretarse a través de los hechos que todavía resisten en su memoria, las de su infancia y adolescencia en Brasil.

Curioso notar, sea cual sea la razón, que dos jóvenes escritores brasileños - Leal con su novela de estreno y Fuks con su cuarta publicación - que el tema sea la relación entre Brasil y Argentina, en un contexto histórico más argentino que brasileño, pero más propiamente brasileño que ajeno.

lunes, 2 de enero de 2017

Vicente Aleixandre - Mano entregada

Mano entregada

Lo que nos mueve hoy es una interrogante, pero antes de tratar de intentar contestarla, he aquí la audición del poema "Mano entregada", para poder acompañar la interpretación que sigue:





Para escribir algo acerca de los poemas de Vicente Aleixandre, parto de la siguiente pregunta ¿acaso los poetas, con demasiada frecuencia, dicen amor donde deberían decir sexo?


Vamos a por el primero, "Mano entregada", que 

acabamos de escuchar en el vídeo.






Empecemos por la estructura formal del poema en la que se desprende una insistencia reiterativa de sonidos e imágenes sensorialies, con más intensidad hacia lo táctil - tanto de contenidos fonéticos con la repetición de los fonemas /t/ y /d/ como de anáforas y aliteraciones - que lo componen. La valoración de los contenidos que se presentan a través de la repetición en estructura variada: 
toco tu mano > mano tibia > delicada manoleve toque > toque leve,
en la primera estrofa, pone de manifiesto el intento de romper la barrera - triste hueso > duro hueso - en el encuentro amoroso que ocurre ya en el último verso de esta primera estrofa: "el amor. Oh carne dulce, que sí se empapa del amor hermoso."

En la segunda estrofa, hay la descripción de la entrega amorosa. Las imágenes sonoras convergen hacia lo auditivo y siguen enfáticamente en lo táctil. Éste está acentuado por la repetición de los fonemas nasales presentes tanto en los adverbios - cuya formación se hace con el sufijo -"mente": secretamente, invisiblemente, dulcemente. Como asimismo en las imágenes sonoras de la poseción: mi voz, tus venas, sangre que sonara, dentro, recorriendo, reseuna mío, sonido de mi voz poseyéndole

Las sibilantes, por otra parte, ponen de relieve la acción demanda por el acto sexual, que oscila de un "tus venas" a "mis voces". Es curioso notar que solamente el "yo poético" tiene voz, solamente sus sonidos se hacen oír.

En la tercera estrofa ocurre el alejamiento de la acción a través de la presentación de los recuerdos de los encuentros amorosos. El obstáculo presente a lo largo del poema y todavía presente en esta última estrofa - "sé que sólo el hueso rehúsa mi amor" -, pese a la concretización del encuentro amoroso, denuncia el constante deseo y la necesidad de conquista diaria que demanda "tu porosa mano suavísima que gime", desde donde empieza el navegar de la nunca satisfacción del deseo: 


tu delicada mano silente, por donde entrodespacio, despacísimo, secretamente en tu vida,hasta tus venas hondas totales donde bogo,donde te pueblo y canto completo entre tu carne.

A título de complementar la interpretación, merece la pena transcribir la interpretación que Carlos Bousoño nos ofrece de la sintaxis de este poema, en su obra “Teoría de la expresión poética”(1999, 238-240):

Su tema es muy simple: el poeta acaricia la mano de la amada, y poco a poco, le va transmitiendo su calor, su vida, que rueda por sus venas:

como otra sangre que sonara oscura, que dulcemente oscura te besara
por dentro, recorriendo despacio como sonido puro
ese cuerpo, ...

La morosidad es, así, un elemento sobresaliente de la representación poética. En este dato aún se insiste:

tu delicada mano silente, por donde entro
despacio, despacísimo, secretamente en tu vida, ...

Veamos ahora lo que ocurre en el aspecto sintáctico de la composición. El más somero análisis nos revela un hecho que no deja de pasmarnos. La sintaxis total del poema, de arriba abajo, desde el comienzo hasta el final, no hace sino reflejar esa morosidad del significado. Quiero decir que la sintaxis del poema, en su conjunto, es retardataria, morosa, y nos da una acentuada impresión de lentitud psíquica.

Detengámonos, por lo pronto, a ver de cerca esa sintaxis, con objeto de explicarnos el motivo de nuestra impresión.

Para obtener un máximo de rapidez en el examen, prescindamos de momento de la estrofa que abre la pieza. Un primer hecho advertimos: en todo el resto de la composición solo existen dos verbos principales, “es” y “ser”, en las estrofas segunda y tercera, de los que dependen veinte verbos subordinados. El fenómeno que pretendemos indagar se nos aclara repentinamente. Si solo hay dos verbos principales en dieciocho largos versículos (cuya medida oscila entre catorce y treinta y tantas sílabas), no puede sorprendernos la lentitud psíquica de todo el poema. Pero hay más, mucho más.

Los efectos poemáticos suelen lograrse por la cooperación de un complejo de causas. Debemos volver nuestra mirada hacia la estrofa primera, que habíamos abandonado. Toda ella es una pura reiteración. Reiteración de las palabras y de las ideas:

Pero otro día toco tu mano. Mano tibia.
Tu delicada mano silente. A veces cierro
los ojos y toco leve tu mano, leve toque
que comprueba su forma, que tienta
su estructura, ...

En solo tres versículos la palabra “mano” está escrita nada menos que en cuatro ocasiones. Pero el poeta se ha servido también del poder dilatorio del adjetivo. Si en el primer instante en que aparece el concepto “mano” tiene este un enunciado simple, en el segundo le acompaña un adjetivo (“mano tibia”), y en el tercero, dos (“tu delicada mano silente”). Por otra parte, el verbo “tocar” está expresado un par de veces, y aun se reitera bajo la especie sustantiva “toque”, y, luego, al decir “comprueba su forma” y “tienta su estructura” (y observamos que aquí “forma” y “estructura” son, a su vez, sinónimos). Y si seguimos leyendo, veremos que antes de terminar la estrofa inicial, nos habremos encontrado con nuevas repeticiones, 
cargadas también de adjetivos:

... el duro hueso
insobornable, el triste hueso...

Lo mismo sucede en la segunda estrofa. Según avanzamos en la lectura, vamos dando con palabras que están reiteradas de una u otra manera: secreta, secretamente; abierta, entreabierta; sangre, sangre; oscura, oscura; sonara, sonido, resuena, resonado; voces, voz; mío, mío; cuerpo, cuerpo, cuerpo; poseído, poseyéndole; etc.

Y aún es más interesante en este sentido la estrofa última, que es una especie de resumen reiterador de la idea general que preside el poema y aun de los vocablos concretos expresados anteriormente.

En suma: bajo el influjo de un doble tiroteo (riqueza de verbos subordinados, abundancia de reiteraciones y de adjetivos), la sintaxis se ha hecho lentísima. Y ese embarazado movimiento oracional no es otra cosa que un reflejo del significado poemático (la lentitud de la representación), al que rinde un sorprendente servicio. Recordemos:

tu delicada mano silente, por donde entro
despacio, despacísimo, secretamente en tu vida.

En este punto convendría decir algo sobre cierto asunto que ahora solo me es lícito insinuar entre paréntesis. Se trata de esto: hemos dicho antes que el poema “Mano entregada” nos produce una impresión de lentitud psíquica, impresión que nos viene proporcionada desde una doble fuente: desde el tema y desde la sintaxis. Ahora bien: ¿por qué el poeta utiliza como tema la lentitud? Esa lentitud es puramente simbólica; es la traducción de otra tácita realidad: la melancolía del poeta. ¿Qué es la melancolía sino una cierta inmovilidad del alma, que hasta se traduce en inmovilidad corporal? Pues bien: la poesía, basándose en esta humana reacción, acostumbra, como nuestro cuerpo, a simbolizar la tristeza por medio de la lentitud.


Aunque Bousoño interpreta como tristeza la estrategia poética utilizada por Aleixandre en este poema, asimismo podemos interpretar, a raíz de lo analizado anteriormente, que se trata de recurso con el objeto de intentar insesantemente alcanzar la conquista plena del objeto de deseo. Dicho e interpretado de este modo, tratemos de contestar a la pregunta inicial: ¿acaso los poetas, con demasiada frecuencia, dicen amor donde deberían decir sexo? No se trata de amor, sino de deseo, Aleixandre en este poema retrata el deseo incesante y el encuentro que lo aplaca momentáneamente.

Al parecer el mismo tema aparece en "La frontera" (lo puedes escuchar pulsando aquí)

domingo, 1 de enero de 2017

"Neruda": La metaficción ha vuelto a estar de moda

La resistencia y la resiliencia 

En su novelae "La Pesquisa" de J.J.Saer nos llama la atención para el hecho de que,

“La conversación diaria de una anciana con su canario, mientras le limpia la jaula, es tal vez el único debate serio de los tiempos modernos, no los que tienen lugar en las cámaras, en los tribunales o en la Sorbona: habiendo ganado, después de haberlo perdido todo, el privilegio de no tener nada que perder, una sinceridad sin premeditación preside su estilo oratorio, que a veces ni siquiera se expresa con palabras, sino más bien con silencios y ademanes significativos, con sacudimientos de cabeza para nada explícitos, y con miradas en las que se confunden ardor y desapego.”


Al desnudar los mecanismos de la pesquisa de su personaje, Saer nos lleva al debate acerca del espacio de barrotes inefable de la palabra.
Los planteamientos que proponemos aquí, se refieren a ese inefable - quizá muchas veces vano - espacio que se convierte en metaficción.


La película "Neruda"



Esta semana he visto la película "Neruda" (Pablo Larraín, 2016), pese a la crítica negativa, que dejaron los expectadores en el blog del cine de una sala en un centro comercial, ¡me gustó! 


Vale, ya sé que no sirve de nada este tipo de consideración sencilla y coriente, así que me propongo a plantear algo acerca del porqué de las críticas negativas de los brasileños y del título de este post. Vamos a ello.


En un primer momento, si uno busca informaciones acerca de la peli, la primera que le aparece es que Gael García Bernal - el famoso actor mexicano - trabaja en ella y ya sabemos que para los cinéfilos hispánicos eso significa peli taquillera, como suelen ser todas las de Ricardo Darín. Pero informo de antemano que pese a que lo tienen en el papel de unos de los personajes emblemáticos, y quizá la elección de ese actor cumpla la función taquillera, la peli no pinta exige mucho más del que la ve por la complejidad de aspectos que la involucra.

Sinceramente, pensaba que a Gael lo pondría de Neruda joven, pues planteaba una peli sencillita tirando a la biografía poética, sin embargo y afortunadamente estaba equivocada. Se trata de una feliz mezcla del "cine negro" con el lenguaje metaficcional biográfico y, en ese contexto, Gael se las arregla como un patético y exquisito Óscar Peluchonneau, probable hijo bastardo de un difunto eminente director general de la Policía de Investigaciones de Chile, al que sucede en su puesto, y se hace encargo de la persecusión del senador Ricardo Eliezer Neftalí Reyes y Basoalto, más conocido por su nombre artístico Pablo Neruda.  

Pero, vamos a tratar de explicar dos cosillas:

1. Lo que pasa es que sin embargo es justamente esta mezcla que puede que no la hayan entendido o no haya caído en el gusto del brasileño, pues las críticas hacían alusión a, p.ej., la "mala fotografía". En otras palabras,  la película trata de llenar el juego ficcional al que se propone filmar el director y los personajes. 

Así que, ante la afirmación de la mujer de Neruda "En esta ficción, todos giramos alrededor del protagonista",  Peluchonneau, se pregunta: "¿Personaje secundario? ¿Yo? No, no señor.

Y más adelante, trata de decirle a un Neruda ausente y que siempre está a unos pasos adelante, en una realidad inasequible:  "Quiero ser testigo de tu muerte. Y voy a ser personaje principal.

Peluchonneau se sabe ficción y lo interesante es que Neruda se comunica con ese perseguidor a través de pequeños regalitos que le hace a lo largo de la trama: le deja siempre una novela policíaca - espacio en el que quiere que se mantenga -, con sarcásticas dedicatorias. Esa clase humor negro, típico de la novela y cine noir.

Por otra parte, en el ámbito de ese mismo espacio ficcional, el director, Pablo Larrain, y su equipo de arte tratan de enmarcar las escenas de persecusión con imágenes al estilo de collages en un blanco y negro difuso, que fácilmente lo percibimos como elemento netamente ficcional. A las que hábilmente contraponen las de fiestas, cabarets y conventillo, extremadamente cargadas de colores. Y,  aunque conocemos la Historia y sabemos que se trata de una ficción, nos aflinge ver a ese policía que le persigue en ámbito ficcional al protagonista, a esa ficción cuyo poder de narración trata de convertirse en Historia Oficial.

En Brasil el cine negro no es cultuado, mucho menos la novela negra - estilo éste muy praticado en el ámbito hispánico e ilustre desconocido de los lectores brasileños -; quizá por ello el público desilusionado no pudo disfrutar del juego de simulacros que hace el director con los elementos de ese género - el carácter oscuro de los ambientes de fines de los '40, lejos de las casas señoriales a las que permite que sus personajes visiten bajo una mirada muy crítica - a la que incluye  la persecusión a un Neruda criminal/ justiciero, según la visión izquierdosa o derechista de cada cual -, la resolución del aura de misterio que el poeta le impone a su perseguidor mientras desvela la violenta, maniqueísta y minimalista división de un mundo entre buenos y malos - pese a la compejidad de los personajes -  se esfuma y la mayor parte de sus personajes son individuos derrotados y en decadencia que buscan su espacio o, cuando menos, algún atisbo de humanidad; así que no nos estraña que ante a la soberbia de un Neruda que se presume de ser superior Álvaro Jara - papel de Michael Silva - le diga "Lo único que le pido es que sea un poco más humilde."


Pero sabemos que la humildad no entra al Parnaso.

2. Por otra parte, otra explicación posible sería la del momento político actual. En Brasil, estamos en medio a una convulsa tormenta de un mar político cuyo barco está a punto de visiblemente romper bombordo y estibordo. Así que para los de derecha/estibordo, no es nada cómodo ver una película en la que el la izquierda/bombordo, además de figurar como protagonista y ser el héroe, denuncia la traición de la derecha, su intento de, en un primer momento, enturbiar y, luego, borrar su imagen y existencia. Ya se nota que, aquí como en todas las partes, la historia se repite y los ánimos no son capaces de percibirse o percibirla como masa de maniobra.


Si el arte - en todos los ámbitos de su expresión - y más precisamente la metaficción van mucho más allá de una simple lectura mimética, peligrosamente desvelan el simulacro de la realidad y así provocan otras formas de pensar, ¿no sería acaso ese motivo del porqué se quiere desahuciarla del espacio social y de la vida del ciudadano común?

Pero no nos preocupemos. A la burguesía sólo le interesa la poesía caduca, decimonónica. Y la voz del poeta, que sea igualmente anticuada. Así que sólo quien ha escuchado las lecturas que Neruda hace de sus poemas - están disponibles en la web -, puede en definitiva aclamar la interpretación de Luis Gnecco, quien la ubica muy bien en su espacio y tiempo.

¿Cómo no apreciar una película que te lleva de una sentada a platear tantas cosas y a releer el presente con el color y el humor del pasado, cuya Historia podemos revisitar y contarla a sabiendas de cuáles son sus códigos?